1. Aromaterapia y Difusores de Aceites Esenciales
Nada transporta a un estado de paz como los aromas adecuados. Difusores de aceites esenciales con fragancias como lavanda, eucalipto o menta promueven la calma y ayudan a reducir el estrés. Puedes colocarlos en la sala, en el dormitorio o incluso en la zona de juegos de los niños, eligiendo aromas suaves que brinden calma y equilibrio.
2. Cojines y Mantas Antiestrés para Toda la Familia (Incluidas las Mascotas)
¿Sabías que una manta pesada o un cojín especialmente diseñado puede hacer maravillas para calmar tanto a adultos como a niños y mascotas? Estas mantas ayudan a crear una sensación de calma al simular un abrazo, reduciendo la ansiedad y promoviendo el sueño profundo. Además, muchos de estos productos son perfectos para las mascotas, que se benefician del peso y la calidez de la manta para reducir su ansiedad.